Deriva

1 May

La estética lo gobierna todo.

Como en la vida de la bióloga SD
que gustaba de los animales peludos
pero un día se fascinó con las hormigas
y cambió ahí nomás su objeto de estudio
o en la de su colega JRZ
que observaba aves por su belleza
hasta que descubrió que eran reptiles
y contra todo pronóstico
aunque sin salirse del cauce que iguala
lo bello con lo lindo lo interesante lo atractivo
se lanzó hacia las serpientes.

La estética lo gobierna todo.

Como en mi vida mental
que durante un buen tiempo
sólo tomaba en determinados vasos y no en otros
abría determinados libros y no otros
besaba determinadas bocas y no otras
o en la de mi amiga FG
que luego de mucho tiempo desocupada
consiguió un trabajo
porque había cambiado de peinado.

La estética lo gobierna todo.

Como en la vida de DE
que es odontólogo.

La estética lo gobierna todo.

Como en la vida del planeta
donde el movimiento de las placas tectónicas sobre el magma
que provoca el desplazamiento de los continentes
desde hace miles de millones de años
es, sin más, maravilla fundacional
que genera, empuja, la variedad,
la abundacia, y le permite a la visión
estética, es decir, científica, de la vida en la Tierra
existir. Esa grandeza.

En otras palabras:
La deriva continental lo gobierna todo.

Así como la deriva náutica
y también la deriva genética.
A los barcos se los lleva la corriente
y a las especies se las llevan a un laboratorio.

La deriva lo gobierna todo.

El desvío, la trayectoria real, el derrotero,
con respecto a la verdadera dirección de las proas
debido a la corriente.
Es como un abatimiento.
El océano es inmenso, claro, y desértico y monótono,
pero la embarcación va de colisión en colisión:
no hay en realidad deriva libre de todo choque
de toda subducción, por así decir,
deriva es darse golpes a los costados cayendo por un precipicio
demasiado angosto
un poco como Jennifer Connelly en Laberinto
cuando le hablan esas manos que salen de las paredes;
en realidad como un embudo que cambia constantemente
de grosor, de textura, de sentido:
ahora caés, ahora te absorben desde arriba.

La estética lo gobierna
todo. Cuando decidís
que ya basta. Que ya no
borro la pared, decís
que ya basta. Que ya no
puedo continuar con eso,
salir.
Como la decisión de abandonarse
a la deriva de esto que digo en deriva
continental en deriva genética
en deriva situacionista en deriva
náutica del concepto:
la náutica en deriva hacia la estética
que nos gobierna en deriva
siendo
deriva misma de la deriva
donde la estética lo gobierna todo
pero -oh, caos amoroso-
siempre en deriva

(y ahí ya algo se rompe, se afea
y se lo ignora)

Deja un comentario